*Esto respecto de la compra de unidades de transporte colectivo impulsadas por motores de diésel y no a gas natural por cuestiones mecánicas
A través de un comunicado de prensa, el Observatorio Ciudadano de Movilidad Querétaro informo que tras “el anuncio del director de la Agencia de Movilidad del estado de Querétaro, Lic. Gerardo Cuanalo Santos, respecto de la compra de unidades de transporte colectivo impulsadas por motores de diésel y no a gas natural por cuestiones mecánicas, debido a la potencia requerida para la orografía de Querétaro, manifestamos lo siguiente”.
“El artículo 36 de la recientemente modificada Ley de Movilidad para el estado de Querétaro y que entró en vigor el pasado 21 de diciembre, agregó un elemento inexistente en la ley anterior (2018); el artículo modificado a la letra dice lo siguiente:
“Los concesionarios o permisionarios podrán iniciar la prestación del servicio con vehículos del modelo correspondiente al año en que se otorgue la concesión o permiso respectivo, o hasta dos modelos anteriores al año del otorgamiento del mismo, y además que la unidad esté equipada preferentemente con sistema de gas, de propulsión eléctrica, híbrida o cualquier otra tecnología autorizada y regulada por la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Poder Ejecutivo, que minimice los efectos perjudiciales al medio ambiente y previa autorización del área competente de la Agencia, para garantizar la correcta operación de la unidad.”
La Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, de observancia obligatoria en el territorio nacional a partir del 17 de mayo 2022, señala lo siguiente:
Artículo 16. De la sostenibilidad.
Las autoridades, en sus ámbitos de competencia, deberán satisfacer los requerimientos de movilidad procurando los menores impactos negativos en la calidad de vida de las personas, en la sociedad y en el medio ambiente (…).
Artículo 17. Las políticas en materia de movilidad deberán fomentar la resiliencia de las personas, de la sociedad y del sistema de movilidad, frente a los efectos negativos del cambio climático. (…) las autoridades competentes aplicarán medidas para controlar y reducir los efectos negativos en la sociedad y en el medio ambiente, derivados de las actividades de transporte, en particular, la congestión vehicular, la contaminación del aire, la emisión de gases de efecto invernadero, entre otras.
Artículo 18. Las políticas en materia de movilidad que se determinen por las autoridades de los tres órdenes de gobierno, promoverán e incentivarán la gradual adopción de las innovaciones tecnológicas en los sistemas aplicados al transporte, vehículos, combustibles, fuentes de energía e infraestructura.
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Como ya fue manifestado en días recientes por la Asociación Mexicana de Gas Natural Vehicular, hace más de una década que los autobuses a diesel son obsoletos en otras ciudades con fuerte compromiso ecológico, además de que el combustible propuesto es, según dicha Asociación, mucho más contaminante que el gas natural, dado que los resultados en las pruebas indican “que los niveles de certificación de gas natural para NOx ya son 10 veces menores que los diesel”. Al margen de esa información, ¿Dónde quedan las innovaciones tecnológicas en electromovilidad, mismas que ya se aplican en estados tan diversos como Jalisco, Yucatán o la Ciudad de México?
La decisión de la Agencia de Movilidad del Estado de Querétaro (AMEQro) de adquirir unidades a diésel va en contra de las leyes estatales y federales, pero también de cualquier consideración de futuro en aire contaminado para con las y los habitantes de la ciudad, presentes y futuros.
Las dificultades respecto de la potencia requerida debido a la orografía de nuestra ciudad, así como las de eficiencia, aunque innegables, no están contenidas en las leyes de movilidad que nos rigen. ¿En dónde queda el desarrollo tecnológico del que tanto presumimos en Querétaro? Acá tenemos universidades, así como centros de investigación y desarrollo tecnológico que bien pueden abocarse a dichas tareas y encontrar una solución adecuada, misma que una vez obtenida una patente, puede ser exportada a otras ciudades en un futuro. Advertimos que, una vez más, no se trata de dependencia tecnológica, sino de dependencia mental, el creer que acá no podemos crear tecnología propia para resolver nuestros problemas.
Confiamos en que haya una nueva licitación y las autoridades tomen en consideración los elementos que en días recientes se han conocido. Estamos viviendo momentos críticos respecto del desastre climático que está poniendo en riesgo toda forma de vida en el planeta. Si queremos un futuro alejado de la mediocridad para las futuras generaciones, no podemos confiar en resolver nuestras dificultades con una tecnología que data de los años 50 del siglo XX y afirmar que miramos a los años venideros con optimismo.
Hacemos un exhorto a las legisladoras y legisladores, tanto locales como federales por Querétaro, a pedir respeto a su trabajo legislativo y conminar a las autoridades de la Agencia Estatal de Movilidad a cumplir las leyes, algo que juraron hacer cuando tomaron posesión de su cargo”.
