Por Alison García
Psicóloga Clínica
El autosabotaje es la tendencia que tenemos a entorpecer nuestras propias metas, objetivos y/o logros a través de la auto manipulación inconsciente. El autosabotaje es un patrón de pensamiento, comportamiento y actitud, a menudo inconsciente, que crea obstáculos en la vida diaria. Cuando una persona comienza a sabotearse a sí misma, en realidad está tratando de permanecer en su zona de confort. Debido a la falta de motivación y autoconocimiento, tendemos al autosabotaje, lo que sugiere que son nuestras propias habilidades las que generan inseguridad, que en última instancia está formada por errores que creemos que nos perdonamos, pero debemos entender que este concepto viene de nuestra propia creación de incertidumbre; de aquí parte la importancia de conocernos y aceptarnos para que no se modifique y evitar crear ideas falsas sobre lo que realmente somos y lo que caracteriza nuestra personalidad.
Desde otra perspectiva, también podemos señalar que el autosabotaje tiene aplicaciones en diversas áreas de la vida diaria, ya sea en el trabajo, las emociones, las amistades y los marcos autónomos, con esto me refiero ciertamente a las decisiones que tomamos con base a un descuido de nuestro comportamiento para lograr lo que queremos. Dudamos de creernos merecedores, de si lo necesitamos, si estamos listos o somos capaces de lograr lo que nos ponemos como objetivos. Los comportamientos que frenan nuestros sueños son comúnmente la procrastinación, las excusas, la indecisión, la vergüenza, la duda y la culpa.
Muchas veces a la hora de realizar tus deseos te detienes, reprimes o te resistes, y esta tentación viene desde la infancia y/o de experiencias vitales estresantes y dolorosas que han depositado en nuestro inconsciente, especialmente aquellos con nuestro narcisismo y autoestima. Maslow decía que la motivación es el deseo humano de satisfacer las propias necesidades, y aunque se le llama auto gratificación, en el fondo es tomar las armas contra los pensamientos intrusivos que nos llevan a tomar decisiones de autosabotaje que puedan traer consigo para bien.
La cuestión es que nuestro presente no es nuestro pasado, pero no hay atemporalidad en el trauma y el inconsciente, lo que nos sucedió de niños sigue vivo y esta voz interior que quiere protegernos, en realidad, lo que hace es frenarnos y sabotearnos.
El miedo que sentimos cuando estamos a punto de lograrlo, o la culpa que sentimos por el logro, radica en nuestro inconsciente, en el aprendizaje que hacemos en previsión de peores resultados, o en las formas que utilizamos para explicar la realidad y el mundo.
Los mensajes que nos da, es decir, los pensamientos del superyó inconsciente que atacan nuestra mente, son del estilo: “Debes hacer esto, no aquello”, “Necesitas mejorar”, “No puedes”; suelen aparecer ante estímulos actuales y nos recuerdan situaciones negativas que han sucedido en el pasado, por lo que actúa como una señal de alarma que nos advierte de un fracaso o peligro y evita que volvamos a sufrir.
“Céntrate hacia donde quieres ir, no en lo que temes”
