Por Monsetrrat García
El gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, prefirió no opinar sobre la reciente aprobación que hizo la LIX Legislatura del Estado de Querétaro respecto del matrimonio entre personas del mismo sexo, pues consideró que “es tema de los legisladores, eso es cancha de cada quien”.
Respecto a si es necesario que como representante del Poder Ejecutivo deba aprobar la reforma de ley para que sea publicada en el periódico oficial La Sombra de Arteaga y entre en vigor, el mandatario estatal aseguró que “No, es cuestión, únicamente del Poder Legislativo”.
Es preciso recordar que el dictamen fue aprobado el pasado 22 de septiembre con 20 votos a favor, tres en contra y dos ausencias, con lo que se permitirá el matrimonio igualitario en el estado sin necesidad que haya de por medio un juicio de amparo, así, Querétaro se convierte en la entidad número 23 que permitirá la unión legal entre personas del mismo sexo, tuvieron que pasar nueve años y tres legislaturas para que esto ocurriera.
Votaron en contra de la reforma, las diputadas Elsa Méndez Álvarez y Concepción Herrera Martínez, así como por Hugo Cabrera Ruiz; mientras que Leticia Rubio y Miguel Ángel Torres estaban ausentes durante la votación.
A pesar de estas ausencias y votos en contra, la mayoría de los diputados locales que aprobaron la reforma son de la bancada panista, por lo que militantes de Acción Nacional han externado que se sienten traicionados; en este contexto, el gobernador del estado fue cuestionado si como panista comparte ese sentimiento, sin embargo, se limitó a señalar “pregúntame después del primero de octubre”.
