*La vacuna es segura y eficaz para prevenir la enfermedad, por lo que se debe aplicar a niñas y niños a los dos, cuatro y seis meses, con un refuerzo entre los 12 y 15 meses
Desde el año 2009, se conmemora el 12 de noviembre como Día Mundial contra la Neumonía, motivo por el cual la Secretaría de Salud (SESA) del estado de Querétaro informa que el propósito es sensibilizar a la población acerca del problema de salud pública que representa y fortalecer la información de esta enfermedad para prevenirla y salvar vidas.
Los casos de neumonía en el estado de Querétaro se presentan durante todo el año, incrementando su incidencia en la temporada de frío. Hasta la semana 43 de 2023, en las instituciones del sector público se ha registrado una tasa de incidencia acumulada de 55.5 casos por cada 100 mil habitantes. Con un total de mil 330 casos de neumonía.
La vacuna antineumocócica previene 90 por ciento el riesgo de desarrollar neumonía grave en personas con más vulnerabilidad de acuerdo con información del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) Ismael Cosío Villegas”, de la Secretaría de Salud Federal.
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La vacuna es segura y eficaz para prevenir la enfermedad, por lo que se debe aplicar a niñas y niños a los dos, cuatro y seis meses, con un refuerzo entre los 12 y 15 meses; a personas de entre cinco y 59 años con alguna enfermedad crónica, y personas adultas mayores de 60), quienes deben ser inmunizadas cada cinco años. Es gratuita en todas las unidades médicas del sector público de Salud y forma parte del Esquema Nacional de Vacunación.
Los casos de neumonía se presentan de forma principal en personas adultas mayores, menores de cinco años o personas con enfermedades respiratorias crónicas, diabetes, cardiopatías, problemas hepáticos, renales, o quienes tienen sistema inmunitario débil. Las niñas y niños menores de cinco años tienen más predisposición a desarrollar neumonía debido a su sistema inmunológico inmaduro, mientras que las personas adultas mayores, debido al envejecimiento, experimentan cambios fisiológicos que afectan la inmunidad innata y adaptativa.
La bacteria de neumococo se transmite de persona a persona a través de aerosoles que del ambiente que provienen de una persona infectada. Puede estar en la garganta y nariz y de ahí viaja al sistema respiratorio. La neumonía también se puede desarrollar por complicaciones de COVID-19 o influenza y algunos pacientes requieren ventilación mecánica, terapia intensiva y soporte respiratorio.
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La Organización Mundial de la Salud (OMS) refiere que la neumonía es un tipo de infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones. Estos órganos están formados por pequeños sacos llamados alvéolos que, en personas sanas, se llenan de aire al respirar, pero en pacientes con neumonía se llenan de pus y líquido, lo que provoca dolor al respirar y limita la absorción de oxígeno.
Los factores ambientales que aumentan la susceptibilidad de la población infantil a la neumonía son: la contaminación del aire interior ocasionada por el uso de biomasa (como leña o excrementos) como combustible para cocinar o calentar el hogar, el vivir en hogares hacinados y por el consumo de tabaco por los padres, mamás o o tutores
Un menor de cinco años con tos y/o dificultad para respirar, acompañada o no de fiebre, se diagnostica como neumonía por la presencia de taquipnea (respiración rápida) o tiraje subcostal (depresión o retracción de la parte inferior del tórax durante la inspiración, cuando en las personas sanas el tórax se produce una expansión). En las infecciones por virus es frecuente la presencia de sibilancias. Los lactantes con afectación muy grave pueden ser incapaces de comer o beber, y pueden presentar pérdida de consciencia, hipotermia y convulsiones.
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La Secretaría de Salud de Querétaro emite las siguientes recomendaciones:
- Vacunar a los menores de cinco años y a los adultos mayores de 60 años para protegerlos contra la neumonía.
- Lavarse las manos de forma frecuente o usar alcohol gel al 70%.
- Al estornudar o toser, cubrirse nariz y boca con un pañuelo desechable o con el ángulo interno del brazo.
- Evitar el consumo de tabaco y la exposición a su humo.
- Limpiar y desinfectar superficies y objetos de uso común.
- Abrigarse bien y evitar cambios bruscos de temperatura.
- Aumentar el consumo de alimentos ricos en vitaminas C y D (frutas y verduras), así como líquidos.
- Dejar de fumar reduce el riesgo de padecer enfermedades pulmonares.
- Si se tiene una infección respiratoria aguda utilizar cubreboca.
Cuando se tienen enfermedades respiratorias es importante quedarse en casa y comunicarse al call center estatal, al teléfono 4421015205, para recibir orientación médica. Para más información acudir al Centro de Salud.